8 CONSEJOS ANTE UNA RABIETA

¿Quién no ha sufrido alguna rabieta por parte de nuestros hijos en un lugar público? ¿Cómo debemos comportarnos?

Muchas veces esas rabietas se dan porque el niño está pasando por un estado emocional difícil, como la tristeza o la frustración, o incluso cuando tienen sueño, hambre o están cansados.

Desde Rubio, la editorial de cuadernos didácticos, nos dan los siguientes consejos para que sepamos actuar la próxima vez que nuestro hijo «monte el espectáculo».

 

  1. Ante todo, hay que mantener la calma. Es comprensible que una rabieta puede sacarnos de nuestras casillas, pero es muy importante evitar tensiones innecesarias.
  2. En lugar de prestar atención a las rabietas, es recomendable hacerle saber que se dialogará con él cuando se encuentre más tranquilo.
  3. Reforzar las buenas conductas es un buen mecanismo para que sepa que valoramos más sus emociones positivas que las negativas.
  4. No pienses que es algo personal, ya que el niño no pretende desafiarte ni retarte.
  5. Es muy importante investigar por qué se ha producido esa rabieta y expresarle al niño por qué se está sintiendo de esa forma.
  6. Los límites y normas son necesarios.  Por ello se ha de establecer qué está permitido y qué no. Y, por supuesto, ser coherente y cumplirlo siempre.
  7. Explica las consecuencias que tendrá su mal comportamiento. No hablamos de castigos, sino de repercusiones lógicas que ellos puedan entender.
  8. Ayúdale a trabajar su inteligencia emocional y a identificar sus emociones. Si comprenden qué les ocurre, será más fácil aprender cómo cambiarlo.

Estamos seguros que con paciencia y un trabajo constante, les resultará más fácil gestionar y evitar esas rabietas para ser mucho más felices.