¿CÓMO HABLO CON MI HIJO DE DINERO? Post patrocinado

Bajo el lema #DeTúaTú la entidad financiera Caixabank ha comenzado una campaña en la que pretende concienciarnos sobre la importancia que tiene la educación financiera en nuestra sociedad.

 

Muchas veces me pregunto si mis hijos son conscientes de lo que significa realmente el dinero y lo que cuesta ganarlo. Mis padres, niños de la posguerra, nos enseñaron a valorar cada céntimo que nos daban y fomentaban el ahorro como forma de vida.

Hoy en día, en una sociedad en la que el consumo prima por encima de todas las cosas, es bueno que nuestros hijos aprendan desde pequeños cual es el valor de las cosas, lo que cuesta ganarlas y cómo podemos crear una buena base de ahorro y consumo para su vida adulta.

Por ello la entidad bancaria Caixabank ha decidido llevar a cabo la campaña #DeTúaTú en la que, a través de una serie de videos divulgativos pretende fomentar la educación financiera en los diversos sectores de nuestra sociedad.

 

El primero de estos videos de Caixabank nos ayudará a resolver muchas de las cuestiones que nos planteamos los padres a la hora de hablar de dinero con nuestros hijos: el valor del dinero, la paga, el ahorro o el consumo responsable.

Una pregunta que nos hacemos la mayoría de los padres, sobre todo cuando nuestros hijos comienzan a hablar de temas monetarios, es si ellos saben en verdadero valor del dinero que manejan diariamente.

 

 

 

El concepto de dinero para los niños

 

El experto en educación financiera y director del Instituto de Estudios Financieros Jordi Martínez explica la importancia de hablar de dinero con nuestros hijos.

 

Los niños deben entender el dinero como método de intercambio de cosas y aunque, al principio sea un concepto muy abstracto para ellos, a medida que vayan creciendo podemos ir introduciendo el tema de las finanzas de una forma divertida.

En el video de Caixabank se proponen diferentes operaciones con dinero que podemos hacer con nuestros hijos para que comprendan el esfuerzo que supone el ganarlo.

Así, por ejemplo, podemos ir a comprar el pan con ellos y que pregunten el valor de este producto en diferentes establecimientos.

Con esto conseguiremos que vean la diferencia de precios de un mismo producto  dependiendo del comercio en el que lo compremos y así  verán  lo importante que es en la economía familiar el ahorro de esas pequeñas sumas de dinero.

 

¿Asigno paga a mi hijo? ¿Qué cantidad es la recomendada para darle?

 

Esta es una de las preguntas que mas controversia crea entre los padres.

Para Jordi Martínez en primer lugar la paga que le demos a nuestros hijos no debería estar ligada a las tareas del hogar.  Estas deben implantarse como una obligación dentro de la unidad familiar sin dinero a cambio.

La cantidad de dinero que asignemos como paga a nuestros hijos dependerá de la edad y lo importante es que sepan adminístrala.

Así, si nosotros decidimos poner una paga semanal a los niños hay que tener en cuenta que todos los caprichos que tengan deberán “salir de su bolsillo” ya que, de lo contrario, no sabrán apreciar el verdadero valor de las cosas.

En el video de la campaña #DeTúaTú aparece un ejemplo muy bueno que podemos hacer con nuestros hijos. Se trata de elaborar una lista con los diez productos que más valor monetario tienen para ellos y a partir de ahí ver lo que cuestan realmente y cómo pueden conseguirlos a través del ahorro.

También hay que transmitirles que las cosas más importantes de la vida no tienen valor material: el amor, la amistad, un beso o un abrazo son de incalculable valor para nosotros. Potenciando estos valores haremos que ellos no solo piensen en dinero cuando sean adultos.

 

Y… ¿Cómo motivo a mi hijo para el ahorro?

 

 

 

Los niños deben ser motivados para el ahorro y debemos incentivarlo. En primer lugar, ellos deben tener un lugar donde depositar el dinero que vayan consiguiendo.

Bien sea a través de una hucha o abriendo una cuenta corriente (los últimos datos del informe PISA han confirmado que los niños poseedores de una cuenta bancaria tienen mejores resultados en la prueba financiera) los niños deben ser conscientes que ese dinero que vayan guardando poco a poco servirá para que puedan conseguir lo que quieran en un futuro.

 

 

 

Hace unos meses, mis hijas se encapricharon con una muñeca que cuesta alrededor de 20 euros. Querían conseguir el juguete inmediatamente, pero les hicimos ver que las cosas en la vida no se ganan de esa forma y que ganar ese dinero supone un esfuerzo.

Tras dos meses de ahorro por fin consiguieron su tesoro. Ese tiempo que tardaron en ahorrar ese dinero hizo que fuesen conscientes de que, conseguir esos 20 euros suponía un gran esfuerzo y mucho tiempo.

 

Podemos usar objetivos familiares o individuales para ello. Así por ejemplo podemos proponer un viaje en familia o una comida en su restaurante favorito para potenciar ese ahorro en familia.

 

 

Y… ¿cómo involucro a mi hijo en economía financiera?

 

En este video de CaixaBank hay un ejemplo que hemos seguido este fin de semana con nuestros hijos con muy buenos resultados.

Hemos ido a comer a un restaurante y hemos dejado que nuestros hijos vean la carta para comprobar el precio de los platos que íbamos a consumir.

Al comenzar a ver la carta les hemos dicho te tenían un presupuesto de 15 euros cada uno para gastar en lo que quisieran. Ahí es donde se han dado cuenta que sus caprichos culinarios pueden salir muy caros y han tenido que compartir algunos de los platos para poder comer lo que querían ajustándose al presupuesto.

Tras pagar, les hemos dado la factura para que revisasen si todo lo que habíamos consumido estaba correctamente indicado en la misma.

 

 

 

 

Y debemos predicar con el ejemplo….

 

Por último y no por ello menos importantes es dar ejemplo como adultos y comportarnos de una forma responsable con el dinero.

Debemos ser conscientes de gastar según nuestras posibilidades, de no comprar siguiendo nuestros impulsos o de pagar los recibos antes de su vencimiento.

Y sobre todo debemos darnos cuenta de que, creando una buena base en economía financiera en nuestros hijos, en el futuro controlarán de una forma coherente y responsable su dinero.