La tarea «igualitaria» que se hizo viral

Afortunadamente la brecha existente entre las tareas que socialmente «tiene que hacer la mujer» y las que «tiene que hacer el hombre» se va reduciendo.

Aquí mostramos como los niños cada vez encuentran más natural realizar tareas «propiamente femeninas» como cuidar de los hijos o hacer las labores domésticas

Hoy os mostramos el fragmento de una redacción de colegio en la que un niño de 7 años explica cómo es su animal favorito. En este caso el animal preferido del niño es un león.

Describo a mi animal preferido:

«El león es carnívoro, tiene la cara llena de pelo y se pasa todo el día durmiendo. Casi nunca sale de caza porque tiene que cuidar de sus hijos»

Como vemos, el niño compara las tareas de un león con las que perfectamente puede efectuar su padre o cualquier padre del Siglo XXI. Esto se debe a que, actualmente ya es casi una visión arcaica y retrograda estereotipar un matrimonio por los roles que usualmente son para los padres (ir al trabajo) y las madres (quedarse en casa cocinando y cuidando de los niños). En la curiosa psicología de los niños de hoy, estas normas del siglo pasado ya no son las que rigen la manera en que los matrimonios modernos funcionan.

Este nuevo modelo familiar tiene sus beneficios ya que hay muchas madres que realmente prefieren trabajar y hay padres que sienten que, es mucho más importante estar en casa con sus hijos y verlos crecer, que desarrollarse profesionalmente.

Estudios han demostrado que a los niños de ahora realmente no les importa que la madre se ausente para trabajar y más bien se sienten contentos con la presencia del padre al llegar de la escuela y en sus actividades extracurriculares.

Como vemos, la tarea igualitaria que se hizo viral, plantea como en la actualidad los roles se están redefiniendo.

En 1989, cuando comenzaron los registros del Pew Research Center acerca de padres que se quedan en casa, este tipo de rol no tradicional era casi desconocido. Solo el 4% de los padres de Estados Unidos, por ejemplo, se quedaban en casa con sus hijos y la mayoría lo hacían por discapacidad o forzados por estar desempleados.  En el año 2018, basándonos en los datos más recientes de Pew Research Center, los padres que se quedan en casa son aproximadamente 9 por ciento, lo que significa más del doble que hace 30 años.