LOS PEDIATRAS PIDEN QUE SE AMPLIE A 6 MESES EL PERMISO DE MATERNIDAD
La Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap) ha publicado un comunicado sobre la Proposición de Ley de permisos de maternidad y paternidad en el que indica que «el objetivo prioritario debe ser prolongar el permiso de las madres al menos durante 6 meses y que las licencias de los padres sean transferibles»
Todos los que somos madres y padres sabemos bien lo que son los permisos de maternidad en nuestro país y hemos sufrido las consecuencias.
En mi caso tuve que dejar a mi hija mayor en la guardería a los 4 meses, como muchos padres de hoy en día, lo que supuso que cada dos por tres estuviese enferma (ya que su sistema inmunitario todavía era muy débil) y el estrés que genera en los padres (y en los niños) el tener que dejar a los niños al cuidado de otras personas.
España, con 112 días de licencia remunerada, está a la cola de los países europeos que tienen menos tiempo de licencia remunerada, ya que en otros países como Italia (220), Noruega (315), Croacia (410) o Suecia (480) el tiempo de maternidad llega a triplicarse.
Incluso llama la atención el caso de Austria, en el que los padres tienen casi el triple de permiso que las madres.
Según el comunicado de la Asociación Española de Pediatría de atención primaria os objetivos de estos permisos son: propiciar la recuperación física de la madre después del embarazo y el parto, establecer un marco que asegure la atención y cuidados al recién nacido y poner las bases para una crianza saludable, facilitando el establecimiento del vínculo y apego.
EL SISTEMA NO PERMITE CUMPLIR LAS RECOMENDACIONES DE LACTANCIA MATERNA
Seguro que a muchas de vosotras os pasó como a mí. Yo intenté seguir con la lactancia materna llevándome al trabajo un sacaleches. Al final poco a poco lo fui dejando y me limitaba a dar el pecho cuando llegaba a casa. El tener que meterme en el baño, los nervios de que alguien me oyese, el tener que mantener la leche refrigerada en la nevera común y alguna otra situación hicieron que poco a poco dejase la lactancia.
La (AEPap) indica que respecto a este tema es importante considerar que la lactancia materna exclusiva es, según la Organización Mundial de la Salud y las Sociedades Científicas, la forma de alimentación ideal para los recién nacidos hasta los seis meses de edad. Aporta beneficios de salud para los niños y madres, además de ser un importante ahorro económico para las familias y el país. La duración actual del permiso de maternidad, 16 semanas en la mayoría de casos, y las condiciones laborales y sociales de las madres trabajadoras que impiden la extracción, conservación y transporte de leche materna, imposibilitan actualmente en nuestro país cumplir con esta recomendación.
Por estos motivos esta asociación indica que, cuando se plantea legislar sobre esta cuestión, consideramos que el objetivo prioritario debe ser prolongar el permiso de las madres al menos durante 6 meses y que las licencias de los padres sean transferibles. Ambos deben ser remunerados.
Si la modificación legislativa no recoge este aspecto, las madres españolas no verían ampliada su baja en un solo día y seguirían siendo, junto con las maltesas, las madres europeas con menos tiempo disponible de licencia remunerada.
En su comunicado los pediatras indican que tras consideraciones a tener en cuenta son: la conveniencia de fomentar y facilitar la corresponsabilidad de los padres en el cuidado y crianza de los niños por lo que sería aconsejable alargar los permisos de paternidad y el interés en que, por motivos de salud del niño, parte de estos permisos puedan ser disfrutados de forma sucesiva a elección de los padres para facilitar la organización en la atención al niño.
Conseguir que estas consideraciones se incorporen al marco legal aproximaría a España a países europeos en los que estos permisos alcanzan y superan los 12 meses, podría suponer beneficios sanitarios y en el bienestar de las familias y supondría además un avance en igualdad, ya que haría posible que muchas mujeres que no pueden hoy permitirse excedencias para prolongar su baja, dispusieran de más meses remunerados.
También podrían favorecer las tasas de natalidad en un país en el que el número medio de hijos por mujer fue en 2017 inferior a la fecundidad de reemplazo (2,1) y en el que la edad de la primera maternidad se retrasa cada vez más, circunstancias ambas con importantes repercusiones demográficas, sociales y económicas.