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Las comparaciones siempre son odiosas. Pero cuando se trata de niños muchas veces podemos crear un trauma en ellos que les puede repercutir en su vida adulta. @Trucosdemamás os contamos nuestras experiencias, primero como hijas y luego como madres en este tema. ¿ Por qué comparamos a los niños?

 

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¿Por qué los adultos nos empeñamos en comparar todo lo relacionado con nuestros hijos y conocidos?

 

 

Cuando era pequeña, no había cosa que más odiase que las comparaciones con otros niños.

Mi madre siempre tendía a compararnos a mi hermana y a mi con unas vecinas de al lado que eran perfectas. Nosotras nos peleábamos continuamente, ellas no hacían ningún ruido en su casa. Ellas eran estilizadas, nosotras no. Eran guapísimas. Nosotras del montón y además ibamos juntas al mismo polideportivo a hacer gimnasia rítmica. Ellas destacaban en esa disciplina y a nosotras siempre nos regañaba la profe por lo mal que se nos daba.

Durante años perdimos la pista de estas dos vecinas y hace unos dos años casualmente me encontré con una de ellas y con su madre por la calle. Su madre nos saludó y «pasó el scanner» de nuestras vidas. Su hija nos contó que tenía un hijo y que vivía con sus padres en el pueblo. Su hermana estaba soltera y residía en Madrid.

Mientras la chica me estaba contando su vida pensé ¿que ha sido de estas dos niñas que se iban a comer el mundo y que destacaban por todo? Al final el tiempo pone a cada uno en su lugar pero lo cierto, pero el recuerdo de esas cosas se mantiene para siempre.

 

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Yo ya me había olvidado de las comparaciones hasta que tuve a mi primera hija. La niña era muy alta y muy delgada y la gente empezó a comparla con otros niños de su edad. Que si era muy delgada, que si no comía, que si el hijo de fulanita comía mucho y se criaba muy bien, que el de zutanita se criaba así porque su madre le daba el pecho y tenía mucha leche…..en fin. Durante el primer año de vida fué un estrés para nosotros (menos mal que la niña no fué consciente del acoso que tuvo por parte de familiares, amigos, vecinos….).

Afortunadamente a partir de ese año la niña empezó a comer bien y aunque sigue siendo delgada, ya no está sometida a ese acoso.

Pero hubo otro añadido más: hasta el año y medio no anduvo. A partir de ahí  tuve que oir  los mil comentarios de gente que me decía que como es que con esa edad no andaba que la llevase al médico, que eso no era algo normal… Estos comentarios generaron la ansiedad de pensar que la niña no estaba bien.

Cada niño tiene una evolución y no por ello va a ser mejor ni peor que otro, pero la realidad es que, mucha gente hace esos comentarios gratuitos sin pensar en las consecuencias.

Mi pregunta es ¿ por qué siempre se tiende a comparar a los niños? ¿Que beneficio hay en ello? A la larga estas cosas lo que consiguen es frustar a los niños y hacer creer que si no son como  los demás esperan es que no valen o están haciendo algo mal .

Un niño es un niño y tenemos que sacar todo lo positivo que hay en él. Nuestras frustaciones como adultos las debemos dejar para nosotros mismos y no perjudicar la vida de un niño que puede ser espléndida.

 

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Nunca me han gustado las comparaciones, de pequeña las viví pero desde el otro lado. Soy la mayor de dos hermanos, más o menos buena estudiante, responsable… y mi hermano tuvo que crecer oyendo a diario, tanto en casa, como en el colegio y el instituto, comentarios por parte de mi madre y de los profesores del tipo: «si estudiaras la mitad que tu hermana», «si fueras tan trabajador», etc, etc. Creo que no solo no benefician, sino que además pueden perjudicar enormemente a la persona, cuando la autoestima no es muy fuerte. Y desde que soy mamá… pues aún las odio más. Mi hijo es pequeño, delgado, come regular, anduvo muy tarde…  Es carne de comparación.

Muchas veces los padres caemos en la tentación de comparar, creo que es algo innato en muchas personas. Pero yo lo tengo claro, delante de mi hijo intento no hacer comentarios comparándolo con otros niños. Tengo que seguir sufriéndolos por parte de los abuelos, y me enfado bastante porque no quiero que mi hijo crezca oyendo esas odiosas frases: «come más y ganarás a tu primo», «tienes que ser el primero, para ganar a todos», etc.

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En mi caso las comparaciones vienen de la mano de mi hijo mayor y los niños de su misma edad. Él es el más bajito de su clase y además siempre ha estado en el percentil 3 de peso. Los dos primeros años de vida le hicieron muchas pruebas porque no engordaba, por si era celiaco, tenía alguna intolerancia etc. pero siempre ha dado negativo. Siempre escucho frases como «debería medir esto», «debería medir lo otro», «está muy pequeño»… al principio me angustiaba y reconozco que lo pasé mal porque, aunque la gente no lo haga con mala intención, lo que provoca es crear una preocupación en los padres, muchas veces innecesaria. Cada niño es diferente y no debemos comparar a unos con otros porque ellos notan esa preocupación o ansiedad y se la transmitimos aunque no queramos. Mi hijo, por ejemplo, ahora dice «he crecido mucho, soy mayor», supongo porque también ha escuchado a su alrededor demasiadas opiniones sobre su físico.

Magia infantil, magia cómica, magia musical y magia de grandes ilusiones se combinan en ‘Imagina Benicàssim. Festival de Magia’, una nueva cita de agenda para el verano benicense que vuelve este año tras el enorme éxito de la primera edición, celebrada en 2014, y que atrajo a más de 6.000 asistentes. En un escenario único como la Playa Torre San Vicente los más pequeños disfrutarán de lo lindo con este evento que volverá a llevar a Benicàssim grandes figuras del panorama de esta disciplina artística.

El festival, que se celebra del 23 al 26 de julio, busca ampliar la oferta de entretenimiento para mayores y pequeños. Y es que Imagina Benicàssim es una cita para la alegría y el optimismo, para la risa, para la diversión más auténtica, para el ocio más diverso, para el misterio, para la ilusión de los más pequeños. Y todo acompañado por la magia del Anfiteatro Pepe Falomir Almela, en la Playa Torre San Vicente. Pero esta nueva cita no es la única que se celebra en este mes en Benicássim ya que los más mayores podrán disfrutar del FIB, el festival de Teatro con Buen Humor y el Ciclo de Música Sacra.

Además de estos festivales, Benicàssim cuenta con muchas ofertas de ocio para que disfrute toda la familia. Además de sus bonitas playas, esta ciudad cuenta con rutas cicloturísticas ideales para aquellas familias que quieran conocer el paisaje de Benicássim. Recorridos con desniveles adaptados para los más pequeños, que cuenta en su recorrido con áreas de descanso en las que disfrutar del entorno. Preciosa la Vía Verde del Mar, que une la localidad con Oropesa del Mar en un trayecto sencillo, que ofrece unas vistas espectaculares.

La lista de atractivos se amplía con la oferta de karts, minigolf, el curioso Parque del Trenet (dedicado a los ferrocarriles en miniatura), la bolera y, por supuesto, el Parque Acuático Acuarama.

La nieve ha hecho presencia en las zonas altas de Cantabria y, además de permitir la práctica del esquí en cualquier modalidad, ofrece otras posibilidades para disfrutar con toda la familia como excursiones en raquetas por los bosques de la región o, simplemente, un bonito paseo en un entorno absolutamente blanco.

Unas de las estaciones más equipadas es, sin duda, la Estación de Esquí y Alta Montaña de Alto Campoo, ubicada en el sur de Cantabria, muy cerca de la localidad de Reinosa, en el municipio de la Hermandad de Campoo de Suso. Cuenta con 23 pistas así como tres kilómetros de rutas de enlace, un circuito de fondo y un snowpark. Un total de casi 28 kilómetros esquiables para el disfrute de mayores y niños.

Y es que, la estación cántabra ofrece servicios de escuelas de esquí donde los más pequeños se lo pasarán de lo lindo aprendiendo este deporte de invierno. También acoge diversas actividades y competiciones durante la temporada, además de fiestas, presentaciones y encuentros para los aficionados. Y esto no es todo, servicios de parque infantil, restaurantes y cafeterías ubicadas en un entorno con un destacado interés paisajístico, cultural y turístico, convierten esta estación en la elección perfecta para disfrutar de una escapada única en este periodo invernal.

Al pie de la estación se ubica el Hotel La Corza Blanca, que a lo largo de la temporada ofrece ofertas especiales para grupos, familias y fines de semana. Puedes consultar toda la información en esta web.

Las Navidades están a la vuelta de la esquina y los más pequeños de la casa disfrutan de unas largas, largas vacaciones (para los padres). Los planes para disfrutar con los niños son muy variados: los mercadillos navideños, estrenos de cines, pistas de patinaje sobre hielo…pero luego llega la hora de sentarse a la mesa y a veces esto se convierte en un problema. Y es que son muchos los restaurantes que no están preparados para acoger a estos pequeños comensales. Desde Trucosdemamas te sugerimos algunas propuestas para que podáis comer tranquilos mientras ellos están de los más entretenidos divirtiéndose a “sus anchas”.

Un plan irresistible para estos días en la capital es ir con los peques al Mercadillo de la Plaza Mayor y recorrer las casetas con los adornos navideños, montar en el tio vivo…y después nada mejor que disfrutar de una super hamburguesa en el restaurante Ernie’s Station. Los niños fliparán en esta hamburguesería ambientada al estilo Americano de los años 50, que se encuentra entre la Puerta del Sol y el Teatro Real (muy, muy cerca de la Plaza Mayor). Además de poder confeccionar ellos mismo sus propias hamburguesas con mil y un ingredientes, se lo pasarán pipa en la parte de abajo en un espacio pensado especialmente para ellos donde podrán jugar al cuidado de unas monitoras mientras los papás disfrutáis tranquilamente de la comida. ¿Dónde? Calle de las Fuentes 10. Web: http://www.erniestation.com/

Otra propuesta también bastante céntrica, muy cerca del planetario, es Mad Planet. Se trata de un restaurante totalmente diferente donde, además de poder comer muy bien gracias a una carta con platos tradicionales muy ricos, los niños cuentan con su propio espacio donde tienen lugar múltiples actividades para que estén entretenidos. Trucos de magia, celebraciones de cumple, fiestas de halloween, exhibiciones de peonzas….no falta de nada en este templo del niño. A ver qué nos tienen preparado para estas Navidades. ¿Dónde? Calle Bronce 10, 28045. Madrid. Web:http://www.madplanet.es/

Y si no os importa coger el coche o transporte público, huir de los agobios del centro y desplazaros a la zona Norte de Madrid, en el número 25 de la calle Manuel Tovar, tendréis la oportunidad de conocer un concepto de restaurante único en Madrid. Se trata de Restaulandia, un restaurante para niños con la estética de un espacio para mayores en el que sus padres y familiares tienen un espacio reservado para que no “interrumpan su diversión”. Desde que los niños llegan al restaurante hasta que se marchan se van a divertir de lo lindo mientras comen, con actuaciones en directo, talleres para que den rienda suelta a su imaginación, música y un sinfín de actividades más. Todo un espectáculo por el precio que cuesta el menú. Y es que, como no todo es jugar, los niños cuentan con un menú casero con productos de temporada y también apto para celíacos y alérgicos. Mientras, los padres pueden disfrutar con tranquilidad de una buena gastronomía o de una zona bar reservada para que puedan estar tranquilos mientras los niños disfrutan de sus actividades. Eso si, quién lo prefiera puede unirse a la “gran fiesta infantil”. Este restaurante abre los fines de semana en horario de comida y cena los sábados. Los domingos al mediodía. Puedes encontrar más información en su web: http://www.restaulandia.com/

De Madrid nos vamos a la ciudad condal porque allí se encuentra uno de los grandes atractivos turísticos que podemos disfrutar en las Navidades. Se trata de El mercado de Navidad de Santa Lucía (o Fira de Santa Llúcia), el más típico de Barcelona, que se encuentra al ladito de la Catedral. Un lugar mágico donde los niños “alucinan” escogiendo todo lo necesario para preparar y decorar la casa antes de la llegada de la Navidad: árboles, ornamentos artesanos que servirán para confeccionar el Belén y los instrumentos típicos navideños como las panderetas. Un plan irresistible que podemos culminar con una rica y tranquila comida mientras los más pequeños se divierten. Toma nota y no pierdas detalle:

Restaurante Semproniana, un local sorprendente donde degustar cocina catalana creativa y con un espacio utilizado para talleres para niños. Atención a sus Patacutxi, unos talleres de cocina para niños de edades comprendidas entre los cuatro y los diez años que se dan cada sábado a mediodía durante la temporada escolar. Una gozada para los peques y para los padres que mientras tanto pueden degustar unos ricos platos en el restaurante. ¿Dónde? En el número 148 de la calle Rosselló, en Barcelona. Tel. 934 531 820. Web. http://www.semproniana.net/

Y de aquí nos vamos a merendar a Papas & the mamas, un espacio muy chulo situado en la parte alta de la Rambla del Poblenou. Este café está muy bien para ir con los niños porque es muy amplio y hay bastante espacio entre mesas para poder dejar los cochecitos de los bebés. Además, hay una zona de juego donde los niños se lo pasan “pipa” mientras meriendan churros, magdalenas y briochería (todo hecho con harina ecológica). También podemos encontrar en la carta hamburguesas y unos bocadillos que están de muerte. Mientras tanto, los padres pueden desconectar tomando una cerveza artesana o un delicioso café. ¿Dónde? Rambla del Poblenou 127-129.

¿Para qué tener el mejor equipamiento de cocina? ¡Para enseñar a cocinar! Y eso es lo que hacen en Kitchen Community: transmitir conocimientos culinarios a toda la familia para que en todas las casas se chupen los dedos.  Y es que este centro ofrece cursos de cocina en Madrid para toda la familia, sí, incluidos los niños. Este mes de diciembre, además de seguir apostando por el difícil arte de la repostería, el grueso de la oferta se centra en la cocina navideña para que el espíritu de estas entrañables fechas también deje su impronta en la cocina. Y sin olvidarse de los niños: Kitchen Community es la única escuela de cocina de Madrid que apuesta por enseñar a los niños de forma habitual.

Pequeños y mayores encontrarán en Navidad una amplia oferta culinaria con la que probar (e incentivar) su buena maña en la cocina. Así, además de los cursos habituales (y ya clásicos de la escuela como las cenas temáticas), este mes los talleres se centran en el aprendizaje de recetas navideñas, y en enseñar a los niños a cocinar especialidades festivas.

El domingo 14 es uno de los cursos que han creado mayor expectación: Una Comida Navideña. En él se aprenderá a elaborar un menú completo de Navidad para que los invitados en casa celebren tan señaladas fechas con un festín digno de las mejores casas.

En las fechas ya más próximas a los festivos, se impartirá el curso de Roscón de Reyes: do it yourself (20 de diciembre), un entretenido taller donde aprender a elaborar uno de los dulces por excelencia de la Navidad. En los Aperitivos Navideños de Lujo  (21 de diciembre) se enseñarán a cocinar varios bocados que serán un gran preludio para las deliciosas comidas de final de año.

Los días 22, 26, 27 y 30 de diciembre y 5 de enero estarán dedicados a los más pequeños de la casa con talleres específicos para ellos como Minipasteleros: galletas navideñas o Minichefs: mazapanes coloreados, y también con algunos cursos para realizar con los padres como el de Dulces Navideños en familia o Cupcakes de Navidad en familia, entre otros.

Todos los cursos y talleres de Kitchen Community son de alta calidad, impartidos por profesionales y dirigidos a todos los públicos. Los precios son populares ya que oscilan entre los 12 euros que cuestan los talleres infantiles hasta los 45 euros de los cursos dobles o más complejos.

Inscribirse en los cursos es bien fácil: se realiza todo a través de la propia página web, y en la misma se elige donde disfrutar del taller, ya sea en Kitchen Community Sexta Avenida o en Espacio Torrelodones.